miércoles, 26 de septiembre de 2018

Sentimentalismo Moderno


Paso los días despreciando la inestabilidad de las personas que dicen amarme, paso los días despreciando cada relación moderna que veo porque desprecio el sentimentalismo frívolo. "Si no me quieres tú, encontraré alguien que si lo haga" y así es como se maneja ahora, somos personas haciendo fila esperando que alguien nos atienda. NO SOMOS ÚNICOS, NO SOMOS ESPECIALES. Si no eres tú, será alguien más. A la mierda las excepciones, el verdadero sentimentalismo en su pura expresión ha muerto y nosotros lo hemos matado. 
"Hago daño porque solo me han dañado"
"Me gusta ella pero mi atención va repartida en cada perfil de Facebook que encuentre y  me entretenga"
¨Le hablo a otras personas porque me siento solo, porque tengo un vacío en mi pecho, porque la chica que yo quiero no me hace caso y lo cubriré con la atención de alguien más¨. Seguro funciona.

El amor que me encuentra no es más que aquel de hombres vacíos que vagan en busca de atención. Recientemente descubrí que mi alma se estaba conectando de a poco y de a mucho con una persona así, y luego de haberlo meditado llegué a la conclusión de que pudo haber sido cualquiera. Me explico, los sentimientos que esta persona cree tener por mí no son más que una ilusión de su solitaria vida. Yo llegué y de repente se sintió acompañado, de repente él tenía con quien hablar y con quien reír y eso desarrolló un apego emocional inmenso disfrazado de amor. La diferencia... es que pudo haber sido y puede ser cualquiera quien haga mi trabajo, no hay gran diferencia. Solo llené un vacío, un vacío que puede ser llenado con cualquier persona que le dedique un poco de atención.

A todo esto, también me encontré con una verdad que me causó aún más ansiedad. 
YO FORMO PARTE DE LO QUE ODIO.
Soy tóxica, soy una bomba de emociones, soy emocionalmente impredecible... Como todo mi clan.
Esto me duele a niveles impresionantes, porque soy incapaz de salir de este ciclo constante de celos, de odio, de rencor y resentimiento. Me lleno muy fácilmente la cabeza con mis propias verdades. Y es que mi autoestima me ata a creer que no valgo absolutamente nada, no valgo un te amo de verdad, no valgo un juntos para siempre, no valgo protagonismo en una relación de verdad, simplemente no valgo un carajo.

Existen allá afuera miles y miles de mujeres que pueden pisotearme sin el menor esfuerzo, ¿para qué hacer perder el tiempo a un hombre que puede conseguirse algo mucho mejor sin el menor esfuerzo? Simplemente me muevo hacia un lado y dejo que tomen lo que hubiera querido tomar yo. Porque a la final, una relación conmigo equivale a una infidelidad a corto o mediano plazo así que GO AHEAD, prefiero quedarme sola, como siempre.

Esta soledad, la merezco. Nadie me lastima directamente y yo no lastimo a nadie. Me quedaré en una esquina observando cómo pasan los días y como se desarrolla mi inestabilidad hasta aplastarme.

Mentiría si dijera que no imaginé algo con esta persona, que no imaginé nuestras manos entrelazadas, un beso suave que refleje el tiempo que hemos esperado por querernos, una calidez en una tarde fría, un silencio cómodo donde solo disfrutamos de nuestra existencia. Imaginé una relación llena de amor y armonía que marcaba el comienzo de una página nueva. Todo esto lo imaginaba mientras caminaba con lágrimas en los ojos detestándolo y detestándome por no poder identificar qué era lo que me estaba lastimando. ¿Qué era lo que él hacía que causaba tanto dolor en mi pecho?
Él me quiere, en algún momento me dijo que me ama. Y el "pero" está en cada acto tosco, cada situación que me hace desconfiar, el "pero" está en su pasado, en sus posibles engaños, y en mi habilidad por verle "peros" a una relación que aún no ha comenzado.

Y es que hay tanto amor encerrado en mi alma, tantas cosas que pudiera dar, tantos momentos que quisiera compartir...

Lo hubiera querido conmigo, a mi lado. Pero no estoy lista y quizá nunca lo esté... ni para él...ni para nadie.


viernes, 30 de marzo de 2018

Límites

Eww, espacio personal, seas quien seas.

¿No te ha pasado que por quedar bien dejas que invadan tu burbuja? Porque ¡ay de ti! Si te alejas o los empujas, se resienten o te tachan de frágil o exagerado.
No necesariamente deben manosearte entero, basta con que la proximidad que sientes entre los dos te incomode y, hablo en general, con familiares, amigos o parejas; simplemente es extraño.

 "¡Tan extraño como yo hablando de este tema!"


O ciertos tipos de trato que algunos usan, como palabras bonitas con las que simplemente no te sientes a gusto. Y no, con esto no estoy diciendo que la solución es que se nos trate a la patada, pero se siente fuera de lugar que una persona que no es de «ese tipo de confianza» se sienta libre de "darte tu cariñito al hablar" porque él sí siente esa confianza contigo.

TODO EXTREMO ES MALO decía mi tío.

Son pocas las personas que permito se acerquen. A veces pienso que el problema es totalmente mío y que todo esto es una mera exageración, que está mal que se sienta mal.

 "Es algo normal, las relaciones interpersonales se manejan así y no ves a nadie llorando por eso." Me dije a mí misma.


«¿En qué punto tuvieron que dañarme para que me haga tanto lío?»

“¿Me estás diciendo que no te gusta que te traten bien?”

He escuchado eso varias veces. ¡Podemos tratarnos muy bien!
Quizás hayan cosas a las que tú estás acostumbrado y yo no, pero se trata de eso: de saber entendernos de a poco y llegar a concretar una confianza con el tiempo. Pero si te encierras en la idea de "Así soy yo y nunca me han hecho problema. Deja el drama y déjate querer.", lo más seguro es que todo termine en una incomodidad silenciosa que logre alejarnos.

Porque no es lo mismo hablar de personas que has llegado a conocer, a quienes molestas y dejas que te molesten, o esa calidez que encuentras en una persona que amas al momento de recibir un abrazo, cuando sientes que estás protegido de todo el daño del universo  «Sensación que espero volver a encontrar o me encuentre algún día»; que hablar de alguien con quien compartes mero compañerismo.

Me he sentido extraña ante el contacto físico con ciertas personas durante dos o tres años, y no lograba entender porqué, pero es que ese chip que incrusté en mi mente años atrás no me dejaba sentir las cosas como tal. Un chip que yo misma diseñé para poder acercarme a las personas dejando de lado mi comodidad, apagando así cualquier reacción negativa que pudiera generar mi propio ser. Todo para poder evitar conflictos. 
Es ahora cuando todo ese cúmulo de sensaciones oscuras están reapareciendo de a poco y de a mucho, haciéndose pasar por otras emociones poco saludables, como el odio injustificado.

Son contadas las personas a quienes confío mi seguridad, donde siento que puedo descansar en paz. Entre ellos familiares y quizá un par de amigas que llevo conociendo desde hace años.

Quizá el punto de todo esto no es cambiar una realidad, sino estar consciente de que algo anda mal y no comprimirlo para que luego se acumule en el ático de nuestros remordimientos. Trabajar en ello, saber identificar los límites y establecer una armonía.